"Red Bull en conversaciones con Ford para los motores de 2026".
- GPblog.com
Se dice que Red Bull Racing está en conversaciones activas con Ford sobre una posible colaboración en la Fórmula 1. Según Motorsport.com el fabricante estadounidense estaría interesado en construir el motor de los coches de Red Bull a partir de 2026.
Red Bull lleva tiempo luchando por encontrar un buen socio para construir sus motores. La asociación con Renault, que comenzó con gran éxito, se disolvió en 2018 debido a la gran falta de fiabilidad del motor. Se formó una nueva asociación con Honda, aunque duró poco. Los japoneses no tardaron en anunciar que se retirarían de la Fórmula 1 después de 2021. Como alternativa, se creó el proyecto Red Bull Powertrains, mediante el cual Red Bull fabrica en gran parte el motor por sí misma, en colaboración con Honda y basándose en el modelo de 2021.
En 2026 entrará en vigor un nuevo reglamento de motores, lo que brindará una gran oportunidad a nuevos proveedores para entrar en la Fórmula 1. A principios de este año, Red Bull mantuvo conversaciones con Porsche para trabajar juntos a partir de ese año, pero dichas conversaciones fracasaron cuando se supo que Porsche querría demasiado control en la organización. Ford también ha mostrado interés en la Fórmula 1 desde hace algún tiempo. Así que se dice que ahora ambas partes se han encontrado y han iniciado conversaciones.
La cooperación podría ser beneficiosa para ambas partes
Para Ford, se trata de un cálculo sencillo: con Red Bull Powertrains, Audi y Honda oficialmente contratados -que al parecer aún quiere mantener abiertas sus opciones- y la expectativa de que Mercedes, Ferrari y Renault sigan suministrando sus propios motores, hay poco margen para que Ford se convierta también en proveedor. Así que una asociación con Red Bull Powertrains para compartir el desarrollo de motores es una opción lógica.
Tampoco es una colaboración impensable. Red Bull como empresa ya patrocina los coches Ford en la competición del WRC. Al parecer, Ford no querría tener el mismo peso en la organización que Porsche exigía, y como Ford tiene los conocimientos y el presupuesto pero no los recursos técnicos y las fábricas de Red Bull Powertrains, la colaboración podría ser beneficiosa para ambas partes. También es una buena ventaja para Red Bull contar con un socio comercial estadounidense en un momento en que la Fórmula 1 se está expandiendo rápidamente en el mercado estadounidense.