Análisis | Liam Lawson probablemente cause algunos dolores de cabeza a Red Bull

Enterarte al final del viernes de que tienes que cambiar tu sitio habitual en el box de Red Bull por una plaza en el AlphaTauri porque Daniel Ricciardo no puede correr. El factor complicado es que nunca has conducido el coche, que no tiene fama de ser especialmente rápido. Además, nunca has estado en acción un sábado durante un fin de semana de F1, y mucho menos has pilotado un Gran Premio, y de repente estás en el punto de mira, el mundo entero te está mirando. Este es el momento por el que has estado trabajando todos estos años.

La mejor actuación de Lawson

Tras una agitada carrera, Lawson terminó el Gran Premio de Holanda en decimotercer lugar. Dos puestos por encima de su compañero de equipo, Yuki Tsunoda -quien es cierto que recibió una penalización de tiempo después y cayó algunos puestos-, pero aún así, Lawson quedó por delante. Tsunoda fue el culpable de una colisión con George Russell, y tuvo que pagar por ello. Por tercera vez esta temporada, el piloto japonés fue superado en un Gran Premio por su compañero de equipo, y además fue por un novato.

Lawson mantuvo su AlphaTauri sobre una pista mojada y complicada, algo que no pudo hacer, por ejemplo, el experimentado piloto, Sergio Pérez. El resultado fue una actuación sobresaliente de Lawson.

Horner satisfecho con el novato

Christian Horner, jefe del equipo Red Bull, elogió al piloto reserva, que tuvo que subirse de repente al monoplaza: "El pobre chico al que han metido en un coche que nunca ha conducido, en mojado, en seco, con las condiciones, con todo lo que pasaba por delante... En realidad creo que lo hizo bastante bien. De hecho, adelantó a Max en la vuelta de salida, cuando Max cambió a los neumáticos intermedios al final. Terminar una carrera así, con la falta de experiencia que tiene, creo que, en circunstancias muy difíciles, se aplicó muy bien", dijo Horner a GPblog y a otros medios.

Ahora está claro que Lawson también estará en acción para AlphaTauri en Monza (mientras Ricciardo se recupera de su operación). ¿Qué pasará después? La escudería italiana ya ha revelado que en cuanto el australiano esté completamente en forma, recuperará su asiento. Según los informes, también la próxima temporada Ricciardo ocupará un asiento en el coche de la escudería hermana de Red Bull. Pero, ¿por qué realmente? Seguramente Red Bull también habrá visto que Lawson tiene las cualidades para triunfar en la Fórmula 1. Si había alguna duda al respecto de antemano, debió de disiparse en Zandvoort.

Mantener encubiertamente a los pilotos actuales

Liam Lawson tiene 21 años y una buena carrera en la F1 por delante, eso ha quedado claro desde el GP de Holanda. A diferencia del veterano piloto de 34 años (Daniel Ricciardo). Seamos realistas: hasta ahora, Ricciardo no ha causado esa impresión aplastante en AlphaTauri que cabría esperar. Entonces, ¿por qué retener innecesariamente a un piloto que, en la forma que mostraba hasta su accidente, no sería un valor añadido como compañero de equipo de Max Verstappen? Desde luego, no si tenemos en cuenta que en la temporada 2025 -el momento en el que podría haber un lugar para él en Red Bull Racing- Ricciardo tendrá 36 años.

Puede que eso tenga que ver con la posición de Yuki Tsunoda dentro de la familia Red Bull. Aunque el piloto japonés es responsable de los tres puntos que AlphaTauri ha conseguido esta temporada, sigue sin estar claro qué pretenden hacer Helmut Marko y Horner con él a largo plazo. Ni una sola vez hablan de que ven a Tsunoda como el sustituto de Pérez. Eso bien podría ser una señal de lo que está por venir: Tsunoda no parece formar parte del futuro a largo plazo de Red Bull.

Con su actuación en Zandvoort, Lawson ha causado algunos dolores de cabeza a la dirección de Red Bull. El dilema ahora es: seguir con Tsunoda y Ricciardo -como casi con toda seguridad era el plan original- o invertir más decididamente en los próximos talentos y dar a Liam Lawson un puesto permanente en AlphaTauri. Si Red Bull Racing y AlphaTauri se atienen a su propia filosofía de formar talentos para que progresen hacia el equipo principal en un futuro próximo, la elección no debería ser difícil.