Esta es la primera reacción de la familia Verstappen a la marcha de Newey
- Norberto Mujica
Max Verstappen lo dijo a principios de año: hay que retener a los jugadores clave de Red Bull Racing. Si no es así, una marcha a la escudería rival Mercedes podría ser factible. Con la marcha de Adrian Newey, la primera figura clave cierra la puerta de Red Bull tras de sí, y el padre Jos Verstappen tiene algunas preocupaciones.
Para Verstappen (y Red Bull), hay que recuperar la calma en el garaje. Las semanas pasan volando, pero las cosas no se calman precisamente. En las últimas semanas, se filtró que Newey se separaría de Red Bull para emprender una nueva aventura y a los pocos días salió el comunicado de prensa.
"El equipo corre peligro de desmoronarse", observa Jos Verstappen en declaraciones a De Telegraaf. "Ya lo temía a principios de año. Para que haya paz interna, las personas clave deben permanecer a bordo. Ahora no es el caso. Newey se va y a principios de año parecía que Helmut también se marcharía. Eso no es bueno para el futuro".
Se evita la suspensión de Marko
A principios de marzo, parecía que Helmut Marko iba a ser suspendido por Red Bull GmbH. El asesor de 80 años estaba supuestamente detrás de la filtración que rodeaba la investigación sobre el comportamiento transfronterizo de Horner. Marko negó ser culpable de ello, y finalmente se evitó la suspensión por los pelos.
Max, por su parte, en aquel momento -no por primera vez, por cierto- vinculó su destino al de Marko."No veo la opción de que se vaya", dijo entonces el tricampeón del mundo. "Siempre he dejado claro que tiene que seguir él. No puedo continuar sin él. Cada uno tiene que seguir en su papel, como siempre ha sido, sobre todo tras la muerte de Dietrich Mateschitz. Cada uno tiene sus propias tareas y he indicado que así debe seguir siendo en el futuro, mientras Helmut viva".