Los medios italianos lo tienen claro: 'Locura en McLaren, Verstappen y Red Bull en crisis'

Corriere della Sera

Corriere della Sera describe una celebración popular en Monza tras la victoria de Leclerc. Ferrari, que a menudo ha cometido errores de estrategia en el pasado, no se dejó tentar por McLaren cuando el equipo británico de Fórmula 1 introdujo al líder de la carrera, Oscar Piastri, en los últimos compases de la carrera. De este modo, Leclerc se dirigió hacia su primera victoria desde su victoria en casa en Mónaco. Una vez más, fue McLaren quien -tanto estratégicamente como en términos de decisiones sobre sus pilotos- cometió errores.

"Leclerc, un piloto instintivo a menudo inclinado a sobrepasar los límites y los riesgos, mostró las cualidades decisivas para convertirse en un futuro campeón. Cuidó los neumáticos durante 38 vueltas y siguió las instrucciones del muro de boxes". Aunque, según el periódico, también mostró su "naturaleza impulsiva" cuando respondió a su ingeniero de una forma que recordaba a un Kimi Raikkonen diciendo: "¡Déjame en paz, sé lo que hago!".

Diretta

El medio deportivo italiano Diretta vio el triunfo de Ferrari gracias a un error estratégico de McLaren y a una apuesta estratégica de Ferrari que salió de maravilla."Charles gana por delante de los dos McLaren de Piastri y Norris gracias a la estrategia y a un toque de locura. Leclerc estuvo increíble. Gracias a la loca estrategia de no cambiar neumáticos al final, el monegasco triunfó en Monza por delante de los rapidísimos McLaren. Verstappen sólo acabó sexto con un Red Bull en crisis", concluyó el medio.

La Gazzetta dello Sport

El periódico italiano abre con elogios para Leclerc, que ganó por segunda vez en Monza. También en 2019, el monegasco puso a su nombre la carrera de casa de Ferrari. "Pero entonces acababa de llegar a Ferrari, acompañado de la temeridad de quien no tiene nada que perder. Esta vez triunfó de una forma mucho más deliberada, con una elección estratégica que requirió imaginación y valentía para idearla (junto con sus ingenieros), pero que no podía hacerse sin un piloto de primera, capaz de concretarla y ganar con lucidez y una gestión de neumáticos sobresaliente".

"Monza confirmó todas las carencias filosóficas de McLaren ante un campeonato del mundo que puede y -dado el valor actual de su coche y los problemas de Red Bull- quizás deba ganar. El equipo lleva meses dando tumbos y sin aprovechar las oportunidades que se le han presentado. Ver cómo Piastri adelantaba a Norris en la primera vuelta (perdiendo también la posición con Leclerc) y no dejarle ocupar la segunda plaza en la última vuelta es un ejemplo de autodestrucción verdaderamente récord. Las órdenes de equipo son molestas de imponer, pero perder títulos que se pueden ganar es sin duda mucho peor".