Hill explica el "problema" con la conducción de Verstappen: "Se decepcionó a sí mismo"
F1 News
- Norberto Mujica
Damon Hill cree que Max Verstappen "se defraudó a sí mismo" tras una "conducción tonta" en el Gran Premio de México. Aunque Carlos Sainz se hizo con la victoria y dio a Ferrari dos victorias consecutivas por primera vez en 2024, lo que más dio que hablar fueron los incidentes entre Verstappen y su rival por el título de pilotos, Lando Norris, que acabaron con el holandés recibiendo dos penalizaciones de 10 segundos por forzar al británico a salirse de la pista.
El fin de semana pasado, en el Gran Premio de Estados Unidos, se produjo un incidente similar cuando Verstappen se defendía de un Norris a la carga con neumáticos más frescos. Cuando Norris intentó adelantarle por el exterior, Verstappen llegó primero al vértice de la curva y se aseguró de que el británico no tuviera espacio para adelantarle en la pista, lo que significó que ganó ventaja fuera de la pista al hacer el adelantamiento, lo que le supuso una penalización de cinco segundos.
Sin embargo, una semana después, en Ciudad de México, fue Verstappen quien se equivocó a ojos de los comisarios. En su primer incidente, esta vez, Norris parecía haber llegado primero al vértice, pero Verstappen empujó al McLaren fuera de la pista, lo que le supuso una sanción de 10 segundos. Sólo tres curvas más tarde, Norris parecía dejar pasar al holandés tras adelantarle por fuera de la pista, pero el holandés se lanzó agresivamente por el interior, perdiéndose la curva por completo, y una vez más, obligó a Norris a salirse de la pista. Y de nuevo, otra sanción de 10 segundos.
La conducción de Verstappen fue "una tontería", según Hill
Hablando en el podcast de Sky Sports F1, el campeón del mundo de 1996, Hill, expresó su opinión sobre la conducción de Verstappen en México: "Creo que, especialmente el segundo movimiento que hizo, fue una tontería. Parecía que Lando le estaba dando la oportunidad de recuperar la posición, pero simplemente aceleró hasta el vértice, pasó y sacó a Lando de la pista, y no tenía ninguna opción. Fue una conducción tonta, y Max se dejó llevar".
El ex piloto de F1 continuó diciendo: "El problema de Max es que se niega a ceder terreno a nadie en un adelantamiento. Es evidente que tiene una gran brillantez y un enorme espíritu competitivo, pero no creo que fuera algo de lo que sentirse orgulloso".
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