Max Verstappen recibió una penalización de cinco segundos en el Gran Premio de Arabia Saudita, y aunque el holandés mostró su desacuerdo, eligió no hablar sobre ello después. ¿Habría sido mejor para Verstappen expresar sus preocupaciones a la FIA, o fue el silencio la opción más poderosa? ¡Vota en nuestra encuesta!
Max Verstappen recibió una penalización de cinco segundos en Arabia Saudita por adelantar a Oscar Piastri fuera de la pista, pero dado que esto ocurrió en la primera vuelta, al holandés se le impuso una penalización de cinco segundos en lugar de diez.
Durante la carrera, ya se pudo escuchar la disconformidad de Verstappen a través de la radio del equipo, con el holandés creyendo que Piastri no le dejó espacio. El australiano contraargumentó que Verstappen nunca habría hecho la curva. Finalmente, los comisarios decidieron imponerle a Verstappen una penalización de tiempo, bajándolo al segundo lugar después de la primera ronda de paradas en boxes, sin poder recuperar la posición y acabando P2 en Jeddah.
¿Debería Verstappen haber expresado sus preocupaciones a la FIA?
Después del Gran Premio, Verstappen
se negó a hablar sobre el incidente o la penalización recibida, no mencionándolo ni en las entrevistas en pista, ni en la conferencia de prensa post-carrera, ni en el paddock después.
La razón exacta de la elección del holandés es incierta, pero podría estar relacionada con las estrictas reglas establecidas por la FIA, con los pilotos no permitidos a hablar negativamente sobre el organismo rector, de lo contrario, podrían enfrentarse a penalizaciones y multas por sus estallidos.
Pero, ¿qué envía el mensaje más poderoso? Hubo un claro desacuerdo de Verstappen con la penalización que recibió después del incidente en la curva 1. ¿Debería haber aprovechado la oportunidad para expresar su descontento en los medios, potencialmente causando algún cambio? ¿O fue más poderoso el silencio del holandés?
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Este artículo fue escrito en colaboración con Sandy van Wijngaarden