¿Tienen razón Brown y Wolff? ¿Hay un paro en Red Bull Racing?

El malestar entre bastidores en Red Bull Racing continúa desde hace tiempo. Desde la muerte de Dietrich Mateschitz, el propietario tailandés y Red Bull Austria se han vuelto diametralmente opuestos. Mateschitz, a pesar de tener una participación minoritaria del 49%, tenía total autoridad sobre las decisiones deportivas. Desde su muerte, Red Bull Austria, de la que Mateschitz era el jefe, ya no tiene esa autoridad.

Ese poder recae ahora de nuevo en Chalerm Yoovidhya, que, con el 51% de las acciones, tiene toda la palabra. Christian Horner se ha acercado cada vez más al tailandés y ahora cuenta con todo su apoyo. Red Bull Austria, cuyo mascarón de proa sigue siendo Helmut Marko, tiene menos que decir, y por eso salió mal parado en el caso Horner.

Por qué Newey quería dejar Red Bull

Mientras los austriacos, respaldados por el campamento Verstappen, querían deshacerse de Horner, el jefe del equipo se limitó a permanecer en su puesto. Todavía hay un caso pendiente contra el británico, dado que la mujer que le acusó de comportamiento inapropiado ha recurrido el resultado de la investigación independiente iniciada por Red Bull.

Esta batalla de fondo le ha costado a Red Bull Adrian Newey. El diseñador de alto nivel nunca lo dirá así, pero sus declaraciones a Sky Sports lo dicen todo. El máximo diseñador había empezado a dudar de su futuro en el equipo durante el invierno, y eso no mejoró a principios de este año, que fue exactamente el periodo en el que empezó a desarrollarse el caso en torno a Horner. Así pues, mientras Horner afirma que la marcha de Newey no tiene nada que ver con el culebrón que le rodea, el propio Newey dice una cosa muy distinta.

Esto tampoco es sorprendente. Newey y su mujer también mantenían buenas relaciones con la mujer que presentó los cargos contra Horner. Así que, posiblemente, todo este asunto también influyó en la decisión de Newey de marcharse.

También hubo malestar después. Newey envió un mensaje de despedida dando las gracias a todas las personas importantes dentro de Red Bull. En él falta el nombre de Marko. Una historia dice que Newey simplemente lo olvidó él mismo, mientras que otra afirma que el campamento Horner hizo que se eliminara el nombre de Marko del comunicado.

¿Sigue Verstappen queriendo dejar Red Bull?

Mientras tanto, Max Verstappen también sigue siendo tentado por otros equipos. El holandés es cuidadoso con sus palabras y no ha expresado ni una sola vez que se quede al 100% en Red Bull Racing. Por otra parte, Mercedes es la alternativa y no está teniendo precisamente un año que le haga desear hacer el cambio. Por lo tanto, un año más en Red Bull Racing no está descartado.

La clave de la marcha de Verstappen está en Helmut Marko. Si Verstappen quiere dejar Red Bull, Marko renunciará. Si el austriaco da un paso al frente, se asegurará de que se active una cláusula del contrato de Verstappen, que le permitiría al neerlandés abandonar el equipo a pesar de tener un contrato en vigor hasta 2028.

También hay desacuerdo dentro de Red Bull sobre esa cláusula. Un bando sostiene que esta cláusula habría estado en el contrato desde el primer día, mientras que el otro argumenta que sólo se añadió más tarde, cuando la lucha de poder se hizo cada vez más clara entre bastidores.

¿Quién se va de Red Bull?

Verstappen no es el único que posiblemente abandone el equipo. Jonathan Wheatley, director deportivo de Red Bull Racing, tiene un contrato que expira y está buscando opciones en otros equipos. Wheatley fue propuesto como posible sustituto de Horner cuando éste fue objeto de críticas, y ahora que eso ya no está en la mesa, le gustaría aprovechar su oportunidad en otro equipo. Alpine y Sauber/Audi parecen los candidatos más lógicos.

Sin embargo, no todos se van. A finales del año pasado, Ben Waterhouse (Jefe de Ingeniería de Rendimiento) y Enrico Balbo (Jefe de Aerodinámica) firmaron un nuevo contrato hasta 2028, seguidos de Pierre Waché en febrero de este año. El director técnico también es fijo hasta 2028, lo que deja intacto el núcleo del equipo técnico.

Naturalmente, a Brown y Wolff les gusta gritar que reciben muchos CV de empleados de Red Bull, pero, por supuesto, lo mismo ocurre a la inversa. Brown y Wolff también lo dicen ahora principalmente para desestabilizar a Red Bull, y eso es normal, según Verstappen. Lo que es un hecho es que el malestar está lejos de haber terminado.

Este artículo ha sido escrito en colaboración con Matt Gretton.