Zak Brown, director del equipo
McLaren de
F1, no se disculpa por el fiasco de los límites de pista en el Gran Premio de Austria. El estadounidense quiere que algo así no vuelva a ocurrir.
La
FIA anunció que tuvo que comprobar no menos de 1.500 casos de posibles infracciones de los límites de la pista tras el Gran Premio. Muchos pilotos no mantuvieron sus coches entre las líneas, especialmente en la curva 10. Esto provocó que varios pilotos siguieran recibiendo penalizaciones de tiempo horas después de la carrera, lo que cambió el resultado final.
A Brown le resulta especialmente irritante que todo el mundo viera venir los problemas hace mucho tiempo. "Creo que lo que tenemos que mejorar como deporte es que todos pensábamos que podía ocurrir lo que ocurrió el domingo y, sin embargo, vimos cómo ocurría", argumenta el empresario.
Hora de actuar
Según el hombre de
McLaren, el pasado Gran Premio exige que se tomen medidas:
"Lo que tenemos que hacer es asegurarnos de que no vuelva a ocurrir y de que hagamos un debriefing adecuado y comprendamos cómo podríamos haberlo evitado", declara a
ESPN y otros medios. Sin embargo, Brown espera que no sea un problema permanente.
"Nunca había visto nada parecido, así que no creo que sea un problema permanente en otros circuitos de carreras
", declaró.